La comedia en el cine mundial.
Cine de ciencia ficción nacional
Por eso no nos debe parecer extraño que la Aquilea de “Invasión” se parezca a Buenos Aires pero a su vez no sea Buenos Aires; es como si estuviéramos en un mismo tiempo en aquel espacio mítico que nos remonta a épocas remotas en las que los dioses intervenían en los asuntos de los hombres y a la vez en la Buenos Aires actual, más precisamente en la de finales de la década del 60´. Este film más allá que no es el primero de este género en nuestro país, sí es considerado como uno de los más importantes debido a que incursiona en el género desde un punto de vista regional. A su vez la participación de Borges y Bioy Casares en el argumento y el aporte posterior de Borges en el guión cinematográfico dotan al film de temas recurrentes de la literatura borgiana. Para algunos Invasión es una película premonitoria de los sucesos que acontecerían una década más tarde en nuestro país. En este filma asistimos a la muerte del héroe borgeano encarnado por Lautaro Murúa, este héroe estoico paga con su vida el hecho de no comprender como el mundo conocido por el va a modificarse a causa de la invasión que a pesar de sus esfuerzos va a ocurrir. La muerte de Julián Herrera (Lautaro Murúa), es una muerte necesaria ya que el tiempo por venir no necesita de hombres solitarios que luchan cara a cara contra su enemigo; sino de una organización clandestina que como única alternativa para combatir a los invasores es a través de una logística de guerrilla.
Hugo Santiago al igual que Jaques Tourner comprendía que lo fantástico del cine era precisamente el dispositivo, que no era necesario apelar a artilugios costosos porque no hay nada más extraño que lo conocido. A todo esto Tourner nos dice: “… “el vagón de metro asediado”, yuxtapone la realidad y el terror. Si pone en escena situaciones básicas que todo el mundo conoce: el último metro, a media noche, y todas estas cosas… impresionan mucho más que un cohete interplanetario. El terror para ser sensible, debe ser familiar…”. Terror al que se familiarizo nuestro país en los años venideros a este film; probablemente el presagio que muchos le adjudican a “Invasión”, no sea tal, es posible que sólo intentara realizar una radiografía de la violencia que hasta entonces se encontraba en un estado de efervescencia; sin embargo el hecho de atribuirle a la película el don de predecir el futuro no sea más que uno de los tantos elementos a los ya mencionados que han construido el mito sobre el film de Santiago.
El caso de “La antena” de Esteban Sapir
Podríamos afirmar con seguridad que la película de Sapir a diferencia a la de Santiago no nos dice nada sobre el tiempo que vendrá sino por el contrario nos lleva a un espacio - tiempo de los primeros tiempos del cinematógrafo. Son claras las referencias a films clásicos de la historia del cine como “Metrópolis” (1927) de Fritz Lang, film futurista que nos introduce en una megalópolis del s XXI; sin embargo el director de “La antena” noventa años más tarde recrea una vez más en la pantalla aquel mundo escindido de la realidad que el s XXI nos deparó. A pesar de evidente y a la vez necesaria referencia a la película de Lang hay una suerte de puente temporal que los une, y es el espíritu por lo experimental. Cuando hablamos de lo experimental entrados ya en la primera década del siglo XXI, nos referimos a las posibilidades estéticas que los dispositivos digitales nos brindan. Sapir nos muestra un mundo fantástico construido a partir de ceros y unos, en el que aún podemos reconocer ciertos lugares que funcionan a manera de fondo como la Facultad de Derecho; sin embargo aquello que reconocemos como la F. de Derecho no lo es, en todo caso es la reconstrucción virtual, es decir es la Facultad de Derecho en su plena inmaterialidad. Por esta razón Lenne nos dice: “… De todas maneras, el cuerpo reconstruido por la tecnología y las prácticas cinematográficas es un cuerpo fantasmático, que ofrece un soporte y un punto de identificación al sujeto destinata
rio del film…”.
Es peculiar la reconfiguración del espacio ideada por Sapir valiéndose de recursos pertenecientes al cine de los primeros tiempos como los clásicos intertítulos o el viñeteado del comic. Esta reconfiguración espacial descansa en una carencia que es la ausencia de la voz. Sapir se vale de la imposibilidad tecnológica de registrar sonido existente en el período alemán de Lang; para diseñar el espacio de su film. Las letras intervienen e interactúan con los personajes resignificando y singularizando no sólo su significado sino también transforman a los sujetos / personajes de la película.
Conclusión
Ambos films no solo dan muestra de una habilidad narrativa sino que también nos posibilita reconstruir o mejor dicho construir la historia de nuestro país por medio de un género narrativo poco explorado y que parecía ser patrimonio de los estudios de Hollywood; lugar al que hasta entonces poseía de manera hegemónicamente el imaginario del mundo; pero como nos han mostrado estos dos realizadores nacionales, que es posible utilizar los recursos y sistemas narrativos en cierta manera ajenos a nuestra historia para contar valga la redundancia nuestra historia. Tampoco hay que dejar de lado la pasión por el dispositivo que no sólo une a Lang con Sapir sino a todos aquellos directores que no pierden de vista de que se trata la ciencia ficción que en palabras de Jean Louis Leurtrat nos dice: “… Así pues, por fantástico en el cine entendemos aquello que hay de fantástico en el dispositivo en sí mismo así como los efectos fantásticos producidos por el cine a través de los medios que le son propios…”
El musical o el cine como palimpsesto
Daren y Varda
La lógica de los films de estas realizadoras tienen como objeto principal ya no concientizar a la sociedad del rol de la mujer como género, sino que los movimientos individuales de estas cineastas no hacen más que reafirmar su “yo” y no paran de gritarlo con fuerza.
En los dos casos analizados hay una búsqueda de la identidad individual, dos formas diferentes de expresarla. Varda apela a un cine que no distingue entre ficción y no ficción, entre lo individual y lo colectivo, entre lo viejo y lo nuevo. Tres binomios que conviven de forma activa a lo largo de toda su carrera. Binomios que constantemente se enfrentan con ella y que al final de cada película hacen las paces, congenian para seguir viviendo en paz. Y hablando de paz es eso lo que se respira en sus películas, demostrándonos que la introspección o ese movimiento de afuera hacia adentro, no necesariamente debe ser agresivo o perjudicial.
Los sueños como las pesadillas forman parte de todas las personas que nos rodean. Tanto el peluquero de la calle Daguerre como los demás tienen sueños que los invaden en las horas de descanso. Ahora bien cuál es la diferencia entre ellos y Varda. Podríamos decir que ninguna; aunque sí hay una, y es que ella construye con esa inmaterialidad, que son los sueños; Varda al igual que sus vecinos debe soñar con su trabajo, nada más que ella los materializa en sus films.La figura del ilusionista que por un breve tiempo interrumpe el devenir cotidiano de esas personas es la figura perfecta que sirve de puente entre ellos y Varda. Y a su vez nos muestra una nueva dimensión de los elementos que conforman el cotidiano de estas personas. Elementos que la misma realizadora conoce apenas una dimensión pero gracias al films las cuchillas del carnicero poseen la factibilidad de ser utilizada para crear un universo personal. Sin embargo Varda nos recuerda que para reconocer el aura mágica encerrada en los objetos es necesario no desvincularse de la realidad que los circunda.Varda al igual que Ponty nos afirma que todo conocimiento es subjetivo aún el conocimiento científico. Por ello no debe de extrañarnos que parta de una definición extraída de un diccionario tan sólo para asegurarse de incluirnos en su universo. Un universo en el que las cosas inútiles se vuelven útiles, en donde la lógica comúnmente aceptada no tiene nada de común.
Mujeres
“… la voz parece prestarse como una alternativa de la imagen, como un medio potencial mediante el cual la mujer “puede hacerse oír”… "
Texto: Doane, Mary Ann
Texto: Doane, Mary Ann
Protec me from What I want
El personaje femenino interpretado por la actriz Catherine Deneuve, Severine, posee fantasías sexuales que pueden adjudicarse como más propias del estereotipo de fantasías sexuales del imaginario masculino. En correlación se presenta al personaje masculino del esposo una imagen de mujer que cumple el prototipo socialmente aceptado. El esposo de Severine se satisface con este canon de mujer sumisa, aniñada, que no transgrede fronteras; tímida y distante en lo sexual… que incluso le pide más tiempo para alcanzar una intimidad mayor.
Sin embargo, Severine, vive una dualidad en pugna en su interior, puesto que sus fantasías sexuales están llenas de notas de violencia y acoso… fantasías que tensan la relación de pareja donde el sexo y el sadomasoquismo están muy lejos de formar parte de la vida de estos personajes.
No es un dato menor el hecho de que dichas fantasías posean rasgos más bien masculinos, este aspecto confronta al hombre marcándole el hecho casi siempre omitido de que la mujer es una persona que desea, siente y quiere llevar a la realidad aquello que anhela… se pone en evidencia que tanto como el hombre el sexo femenino posee un imaginario que posiblemente quiera transgredir. Esta confrontación abre el cerrojo más temido y es el descubrir que no hay un poder o control real posible sobre la interioridad de una mujer y coloca en igualdad de condiciones a ambos sexos. Aquí la mujer muestra que como el hombre puede ansiar y ejecutar en pos de aplacar la sed de placer que posee… Las fantasías sexuales funcionan como el igualador de las circunstancias.
El personaje de Catherine Deneuve vive presionado entre la ansiedad de cumplir sus deseos y la necesidad de permanecer en el rol de esposa y dama de la sociedad. Los acosos recibidos en la niñez que vemos como flashes que duran algunos pocos segundos, nos dan el pie de cierto trauma que pudo haber reprimido durante mucho tiempo el desarrollo de su sexualidad de forma natural. Esto nos convoca ante el hecho actual y real de lo que en la infancia suele ocurrir a muchísimas mujeres, la educación machista y represora sumada en muchos casos a experiencias de abusos y acosos estigmatizan la feminidad y truncan la armonía de su crecimiento.
El rechazo de la hostia, el cuerpo de Jesucristo, es la acción del rechazo de la cultura cristiana donde el hombre es dueño y señor y la mujer es sumisa y acata. Este acto trae al relieve las propiedades de este personaje femenino que en su foro interno no comparte esa visión y sus acciones van a ser consecuentes con sus deseos y no con lo que las reglas que otros, hombres; han impuesto.
En Volver, de Pedro Almodóvar, se hace uso de las leyendas populares para disfrazar el hecho de que el personaje de Carmen Maura, madre de la protagonista (Penélope Cruz), realmente no había fallecido en el incendio junto a su esposo y que, a su vez, había sido la causante del mismo. Es por ello que el alma de Carmen Maura deambula por la casa de su hermana Paula que está muy anciana y pronta a morir. Como fantasma que regresa de la muerte a acompañar para acompañar y concluir tareas pendientes. Es así como esta leyenda se mantiene intacta hasta el final de la película para dar acceso a la perpetuación del rol de ayudanta que la madre de la protagonista desea tener, un poco se podría decir para expirar su vergüenza personal que fue no haber dilucidado que su hija fue abusada por su marido preñándola y dejándola sola y casi expulsada de la familia. Esa falta hacia esa hija es la que no va a devolverla a la vida por decisión propio, la calidad de fantasma es una elección.
Por otro lado en este film se aprecia los lazos familiares como determinantes y desencadenantes de las cosas buenas y malas de las vidas de los personajes. Hay una marcada presencia de los lazos familiares y la psicología de los personajes responden en sus características a las peculiaridades de dicha familia. Una familia matriarcal donde el hombre aparece como un agente externo que al entrar al núcleo corrompe y hace un daño… el padre de la protagonista la viola y deja embarazada, el marido de la hermana la abandona y desaparece, el marido de Penélope trata de abusar de la hija de ella. Lo masculino es sinónimo de peligro… es el signo negativo, sin embargo, es gracias a estas agresiones desde el otro género las que van a posibilitar la ruptura y reunión de estas mujeres a su núcleo familiar. Volver con la verdad y permitiendo que la nueva unión sea realmente indisoluble.
Este aspecto de la mujer en vigilia de la mujer y resguardándose de los lobos que son los hombres se ve claramente en la escena donde Penélope Cruz asume el asesinato de su marido para salvaguardar a su hija de una condena. Se hace cargo de absolutamente todo, hasta de enterrarlo… todo con la única finalidad de limpiar las manos de su hija a costa de pagar ella eternamente. Este punto es interesante porque el personaje de Penélope revierte lo acontecido a ella en su adolescencia… no es una madre que no ve… ella jamás dejará de ver.
La familia como elemento constituyente de la personalidad y actitudes de un individuo… este rasgo se acentúa o diluye considerando las raíces sociales de cada sociedad. Es por ello que en el film de Buñuel, Belle de Jour donde tenemos retratada la sociedad francesa de la década del ´60, no hay familia a la vista y los pocos recuerdos hay una carencia total de una presencia de cualquier índole familiar. La imagen de padre o de madre no existen esto explica que el personaje sea circular a su individualidad y caiga en el hedonismo de la autocomplacencia.
En el film Nadie me quiere, de Doris Dorrie, nuevamente tenemos un personaje femenino que carece de una imagen de familia, apenas aparece una madre que actúa un poco como elemento punzante en ella. Es un personaje solitario en busca del amor que ante su extrema soledad acude a un quiromántico negro y homosexual que termina siendo su mejor amigo y viviendo esta amistad muchas veces con actitudes propias de una pareja heterosexual. Este grado de acercamiento entre estos dos individuos se produce a partir del encuentro finalmente de una persona que los quiere cuida y valora… se produce en ellos un amor que roza la pureza y ese amor es muy auténtico y es tal vez el mejor amor que ambos hayan tenido. Llegan a amarse profundamente aunque nunca se confunde este amor con el amor de un hombre y una mujer. Films Belle de jour, Luis Buñuel Volver, Pedro Almodóvar Nadie me quiere, Doris Dorrie
El expreso oriente
Tarde de perros
"... El trabajo creativo es muy duro, y algún tipo de autoengaño resulta necesario, aunque solo sea para ponerse manos a la obra. Para empezar, debes creer que aquello que acometes va a salir bien. ¡Y ocurre tan a menudo que no es así! He hablado con novelistas, directores de orquesta, pintores... De modo infalible, todos admiten que el autoengaño es importante en su trabajo. Quizá una expresión mejor sea "creer en lo que haces". Pero yo tiendo a ser un poco más cínico, y lo llamo "autoengaño"..."
Extraído del film "The Sting" (El golpe)